Los osos que he visto
Hace unos dias conté los osos que he hecho. Ahora me toca comentar los que he visto mientras he estado corriendo.
Los dos primeros fueron precisamente en el maratón de NY. El maratón cruza algunos puentes por debajo en Brooklyn. Al cruzar por debajo de uno de ellos veo como algunos corredores hombres se orillan y comienzan a regarlo... Si, ahi enfrente de todos. Sin ningún pudor ni recato; algo asquerositos. Digo, se hubieran ido aunque sea detrás de un poste. Desafortunadamente en una carrera muchas personas pierden el estilo, como cuando me tuve que embarrurnar de Vaselina ahi en donde las arañas hacen su nido en medio de la calle y a la vista de muchas personas. Por supuesto esto no pasa solo a los hombres, mas adelante relataré otra historia.
El segundo fue cuando estabamos cruzando la 4th Ave también en Brooklyn. Es una avenida amplia de 3 carriles de ida y otros 3 de regreso. En medio hay un camellón. Iba corriendo por ahi cuando de repente escuché unos gritos. Pero estos fueron diferentes a los de apoyo, mas bien fueron de "ya valió madre", no es dificil reconocerlos. Lo primero que pensé fué : Ya valió, seguramente es "un-tal-Ivan" que ya hizo un desmadrito. Volteo para enterarme lo que estaba sucediendo y veo una señora robusta - por decir lo menos - tendida en medio de la calle. No estaba vestida de corredora. Resulta que la susodicha trato de cruzar la calle tipo juego froggy y terminó embarrada en el suelo. Pobre señora, pero también a quién se le ocurre?. Era imposible frenarse de zopetón porque ya tenías a mucha gente detrás tuyo y podría formarse una carambola de corredores. No llegó mas que al segundo carril, cero puntos.
El tercer oso ocurrió en el White Rock Lake, iba corriendo y a unos 100 metros iba otra corredora joven yendo en la misma dirección. No había nadie mas a la vista. De repente se detiene y se pone en cunclillas y agarrandose el estómago. Madres! Algo no estaba bien. Me apresuré a llegar para preguntarle que le pasaba y doble Madres! Abajo de ella había un gran charco amarillento. La pobre no logró llegar al baño que ya se encontraba unos metros adelante. Ya no supe que hacer... apenarla mas preguntándole o hacerme el buey como que no vi nada. Como no era asunto de vida o muerte sino un simple caso de "me ganó" opté por lo segundo.
Para que vean que no soy tan criticón ahi les va una mia: Iba corriendo en un día muy caluroso mientras estaba sudando abundantemente. Llevaba una camiseta técnica de correr nuevecita de paquete color blanco. Es conocido entre los corredores y ciclistas que la combinación sudor, tela, piel y rozamiento puede crear problemas pero yo era la excepción. No lo sabía. Ahi iba corriendo feliz cuando noté que la gente se me quedaba viendo. Se me hizo raro pero seguí corriendo... Ya cerca de mi casa comencé a sentir molestias en los pezones... Al ver que estaba sucediendo... ay buey!!! estaban sangrando... y duelen de a madres!! Mi camiseta nueva arruinada con dos hilillos de sangre corriendo por ella. Para eso sirve la vaselina, el BodyGlide o por lo menos unos curitas para evitar el rozamiento.
Afortunadamente ya estaba cerca. Hice una llamada a la jefa y vino en auto a mi rescate. Que oso!
La Marmota-ardilla
MUSica: Cartas marcadas / Cuco Sánchez
miércoles, noviembre 18, 2009
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