¡Que mello!
La semana pasada estuvo muy pesada. Mi jefe estuvo de vacaciones y el trabajo se me acumuló. Además que estuve preparándome para realizar un mantenimiento a los servidores principales de uno de mis clientes. Era una semana complicada hasta el miércoles. Estaba prepándome para ir al lunch y después realizar un trabajo un poco delicado a las 2 PM. Eran poco después de las 11 de la mañana cuando escuché sonar el teléfono de mi trabajo. Era mi esposa:
"Me acabo de cortar el ojo y lo tengo muy rojo".
Me quedé atónito. "¿Cómo? ¿Qué paso?".
"Me corté adentro del ojo con una hoja de papel", respondió.
Sentí un escalofrío muy fuerte. Me acordé del problema que mi papá tuvo el año pasado y que terminó con la pérdida de visión de su ojo.
Dejé todo lo que estaba haciendo y me fuí a donde estaba. En unos minutos llegamos a urgencias del hospital.
En el hospital la recibieron rápidamente y le revisaron el ojo. Le pusieron unas gotas para adormecer el ojo afectado y otras para poner en contraste y verlo con una lupa y luz ultravioleta. El doctor me mostró la pequeña herida en el ojo. Era un rayón en la córnea. Aunque me dijo que no me preocupara traté de mostrarme fuerte para no asustar a mi esposa. Le mandó un antibiótico en gotas y nos pidió que vieramos a un especialista al día siguiente.
En ese momento pude enterarme como estuvo el accidente. Fue algo parecido a cuando uno se corta un dedo con el filo de una hoja de papel. Todo paso en cuestión de segundos.
Me dió tiempo de regresar el trabajo en donde tuve que terminar el trabajo que tenía programado aunque mi mente estaba ocupada. Tan pronto terminé me fuí a mi casa. Hasta ese momento terminó la adrenalina y sentí un bajón fuerte. Salimos a cenar y nos fuimos a la casa.
El Jueves fuimos a ver al oculista. Le revisó el ojo y le puso un pupilente para que sirviera como parche (curita). Hasta el viernes la herida no había cerrado y sigue con el pupilente. Hoy tiene una cita nuevamente. Estamos optimistas que por fin la herida haya cerrado.
Esa fueron las razones por las cuales dejé de escribir este blog por unos días. No estaba de humor, pero aqui estoy de nuevo.
La Marmota
lunes, octubre 18, 2010
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