viernes, noviembre 06, 2009

Maratón de New York 2009

El viaje hacia New York salió como estaba planeado. Llegamos a nuestro hotel después de las 11:30 PM. Nos hospedamos en el Comfort Inn Central Park West localizado en la W 71st Street. Hice la reservación de hotel y avión tan pronto me enteré que había sido seleccionado en la loteria. Cuando elegí el hotel pensé que iba a ser un gran problema porque el hotel estaba fuera del area de los hoteles recomendados para el maratón en el distrito de teatros; los cuales estaban llenos en esas fechas.

Mi idea estaba alejada de la realidad, el hotel se encuentra a unas cuadras de la meta. Es posible bañarse y descansar tan pronto termina la carrera. No se imaginan cuánto se agradece. No esperen un hotel cinco estrellas. Los cuartos son microscópicos y razonablemente limpios. Sobretodo mucho mas barato que los hoteles del distrito de teatros. He tenido la oportunidad de hospedarme en hoteles de diferentes categorias en NY. Este hotel cumple su cometido.

Tan pronto nos documentamos fuimos a Times Square a cenar. De ahi a dormir para despertarse temprano e ir a la expo a recoger mi número de corredor y mi chip.

La mañana siguiente nos despertamos y tomamos el metro para ir al Javits Center. No hubo ningún contratiempo para llegar y en menos de 10 minutos ya tenía mi pequete de corredor. Me impresionó la organización, pero eso no fue nada con lo que me tocó vivir el dia siguiente.

Después de eso nos fuimos a comer y fui a ver la meta en Central Park. Coincidió que ese dia era Halloween y mucha gente estaba disfrazada en las calles. En la noche fuimos a un desfile pero estuvimos esperando mas de una hora para que comenzara y nos llovió. No terminamos de ver el desfile. Me comenzó a doler la espalda. Eso me preocupó un poco así que nos fuimos a dormir.

En la noche desperté varias veces de la emoción. Ya quería que amaneciera. Cuando por fin fue hora de arreglarse todo transcurrió sin problemas. Cuando salí pensé ver mucha gente en la calle y nada... Ni un alma. Tomamos un taxi para ir a la parte sur de Manhattan. Nos tardamos como media hora y no hubo nada de tráfico. Seguí pensando: - Ah chihuahua (o ah chingaos) a dónde se habrán metido todos?

Cuando llegamos al muelle donde saldrian los barcos que nos trasportarían a Staten Island fue cuando comence a ver escenas conocidas: Corredores yendo de un lado a otro con sus bolsas. Ahi comencé a sorprenderme de la organización del evento. Todo estaba sincronizado. Barcos y camiones transportando gente de Manhattan, New Jersey, Brooklyn hasta Staten Island, donde inicia la carrera. Movilizar mas de 40 personas a un mismo lugar sin contratiempos requiere una logistica impresionante.

El trayecto de Manhattan a Staten Island tardó unos 20 minutos. De ahi nos subieron a unos camiones para transportarnos a Fort Wadsworth que está en la base del puente Verrazano-Narrows el mas grande de NY.

Durante la transportación me di cuenta que muchos corredores eramos extranjeros. Vi gente de Italia, Francia, Dinamarca, Japón, México lindo y querido, Colombia, Brasil, etc. Fué muy agradable escuchar muchos idiomas y ver tanta gente con un mismo objectivo: Correr el maratón.

Yo pensé que iba a aburrirme dos horas pero no fue así. Me había llevado una bolsa de dormir que la jefa compró por módicos $4 dólares y así me protegí del frío. Me dió tiempo para desayunar y tomar liquidos.

A mi me tocaba salir en la segunda oleada de corredores, la primera es para los profesionales y corredores de tiempos muy bajos. Faltando media hora para que fueramos llamados a nuestros corrales (muuu...) pasé al baño. La primera de cuatro veces que tuve que pasar antes comenzar la carrera. Los nervios.

Cuando avisaron que los corredores de la segunda oleada tenían que dirigirse a los corrales mi corazón comenzó a palpilar emocionado...

Continuará
La Marmota

MUSica: Verdad Amarga (Consuelo Velazquez) / Interpreta: Pablo Milanés


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