Me volvió a pasar, que oso...

Resulta que hace unos dias publiqué una fotografía que una corredora había tomado durante el maratón de Austin en la que aparecían otros corredores de espaldas "regando las plantitas". Los llame "asquerositos". Al día siguiente recibí un mensaje de la misma persona que había tomado la fotografía para comentarme que uno de esos "asquerosos" era ni mas ni menos que su esposo. En la madre! Que oso. No pensé que ninguno de los corredores que nos seguimos en twitter estuviera leyendo mi blog. Ni mucho menos que entendiera español. Afortunadamente la fotógrafa lo tomó de muy buen humor.

A partir del Lunes voy a estar solitario por casi un mes. Mi esposa va a salir de paseo a México, Chile y Argentina. Yo me voy a quedar a cuidar a mis gordos: Lucas y Frida.

A mis gordos los adoptamos de un albergue de rescate. Sus papás habían sido recuperados de un puppy mill. Yo estaba muy triste después de ver partir a mi mas grande corazón: Linux Hermenegildo, mi primer Yorkie.

Aunque me había prometido jamás tener un perro; después de unos meses comencé a buscar en todos los lugares de rescate de perros. Había encontrado un perro que estaba en Houston. Hicimos todos los arreglos para adoptarlo pero como estaba en una casa temporal, la persona que lo estaba cuidándolo no hizo nada por ayudar en la adopción. Descorazonado, volví a buscar y encontré en un lugar mas cercano - relativamente - a una perrita Yorkie que estaba en adopción llamada Susie. En el mismo lugar estaba otro yorkie macho que tenía una cara preciosa llamado Simba. Estuve varios dias intentándo comunicarme al lugar donde se suponía que daban informes. Envié infinidad de correos electrónicos. Total, ya estaba dandome por vencido cuando recibí una llamada de la encargada del lugar. Era una persona que había puesto un albergue de rescate en su rancho en la ciudad de Weatherford, TX. Esa ciudad queda como a 1:30 horas de mi casa.

La persona se disculpó por no haber contestado mis llamadas y me comentó que efectivamente Susie y Simba estaban en adopción. Ambos habían sido rescatados de un puppy mill, lugares miserables en donde hay personas sin corazón que abusan de los animales con el único propósito de lucrar con las crias. A los pobres animales no se les tiene en menor cuidado y viven sin buena alimentación ni atención médica, en medio de la basura y excrementos. Desgraciadamente hay muchos lugares de esos todavía. El abuso es extremo.

Susie y Simba tuvieron la fortuna de ser rescatados. Susie estaba esperando perritos al ser llevada al albergue mismos que nacieron ahi. Entre ellos estaban mis gordos: Lucas y Frida.

Lo demás es historia, ellos son los reyes de la casa y agradezco a Dios que me haya permitido tenerlos. Solo espero que los otros dos hermanitos, además de sus papás Susie y Simba hayan podido encontrar una casa en donde los quieran también. Ojalá hubiera podido adoptar a todos.

Al menos puedo decir que "tengo un perro que me ladre".

La Marmota
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