La pájara Pegui

Los últimos dias he estado muy ocupado en mi trabajo, por eso no había escrito. Afortunadamente ayer terminé un proyecto y todo quedó bien.

El lunes desperté con la agradable noticia que la pajara Pegui había por fin logrado que naciera un pajarito después de dos intentos fallidos. Lo habia bautizado como el pequeño Pipiolo. Durante las dos semanas que Pegui estuvo empollando su huevo tuve mucho cuidado de no asustarla mientras cortaba el pasto de mi casa.

Todavía alcanzamos a ver la cabecita pelona del Pipiolo. Todo iba bien hasta ayer. Cuando llegué a mi casa el nido estaba vacío. No había rastros de la pajara Pegui ni del pequeño Pipiolo. Simplemente se esfumaron.

Esto me pone algo triste porque la pajara Pegui siempre estuvo en su nido. No tengo idea si come algo durante las dos semanas que esta empollando el huevo. Aguantó calores, lluvia y frío. Es muy triste que todo haya terminado asi. Es imposible que el Pipiolo haya volado porque todavía no tenía plumas. RIP el pequeño Pipiolo. *Sniff* *Sniff*

El calor ha llegado a nuestra área y eso que todavía no comienza el verano. Me está costando trabajo salir a correr en esas condiciones. Me quedan ocho semanas de intenso entrenamiento para estar preparado para mi primer ultramaratón. No sé como le voy a hacer, pero me voy a tener que quitar la hueva o de plano no voy a poder terminar esa carrera.

Esta semana va a estar mas pesada que de costumbre porque van a cambiar el piso de mi casa. Es imposible tener una alfombra limpia con Lucas y Frida así que decidimos cambiarla por piso. El fin viernes y sábado voy a tener trabajadores en mi casa todo el día.

Rento nido en buenas condiciones. Buen precio. Pregunte sin compromiso.

La Marmota